Lunes, 19 de Junio de 2006 03:45:00 a.m. |
€NGELS GALLARDO El Instituto Valenciano de Infertilidad (IVI) de Barcelona ha
conseguido el nacimiento de una niña libre de una grave alteración genética
--el síndrome X frágil-- que habitualmente es motivo de interrupción
legal del embarazo ya que, de completarse la gestación, da lugar a una
persona con retraso mental y alteraciones morfológicas en la cabeza y
los genitales. El síndrome X frágil es una enfermedad monogénica, en
un único gen, y su eliminación completa en un recién nacido es un
acontecimiento sin precedente en Cataluña. La mamá de la niña, que ahora tiene seis meses y está sana, era
consciente de que sus genes son portadores de dicha alteración por
herencia familiar, una información imprescindible que permitió
realizar el diagnóstico genético de sus embriones para intentar una
gestación libre de la alteración. El proceso se inició en el tercer día de evolución de los
embriones, que se generaron en probeta a partir de los óvulos y el
esperma de la pareja. En esa fase, cuando los embriones estaban
compuestos por entre seis y ocho células, los biólogos del IVI,
dirigidos por el doctor Agustín Ballesteros, extrajeron dos células de
cada uno, e hicieron una biopsia cuyo objetivo fue identificar a los que
estaban libres de la enfermedad, para separarlos del resto sin dañarlos. CONTROLES EXTREMOS Tras conseguirlo, en un proceso que consistió en
copiar de forma exponencial parte del código genético de cada célula,
el embrión sano le fue transferido a la mujer, que inició su gestación
bajo unos controles extremos. El síndrome X frágil procede de la mutación del gen MFR1, que se
aloja en el cromosoma X, el que determina el sexo del individuo.
"Cada célula del organismo humano tiene 23 pares de cromosomas,
pero dentro de cada par hay una combinación de entre 20.000 y 25.000
genes --explica Ballesteros--. El síndrome X frágil surge de una lesión
pequeñita dentro de una porción del ADN de un cromosoma". Las alteraciones en un solo gen pueden causar más de 300 enfermedades graves, para las que la ley española de interrupción voluntaria del embarazo autoriza el cese de la gestación. El IVI ha diagnosticado los genes asociados a 24 de esas enfermedades, y puede identificar a más de 50, asegura Ballesteros. |